Como hacer mermelada. Conservación. Permacultura en Galicia.
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En muchas ocasiones, nuestro huerto ecológico ó bosque de alimentos producirá tal cantidad de fruta que no podremos consumirla en su totalidad antes de que se estropee. Además de compartir con familiares y amigos, habrá que recurrir a técnicas de conservación antes de su deterioro y consiguiente desperdicio.
Una de las alternativas más sencillas y populares es la elaboración de mermeladas. Este método que mostramos a continuación, se puede aplicar a la mayoría de frutas sin ningún problema.
Para este procedimiento necesitaremos botes de conserva, que podemos comprar o mejor aún reciclar si hemos consumido alimentos envasados en este formato, siempre que el frasco y la tapa estén en óptimas condiciones.
Los botes que utilicemos deben estar totalmente limpios, sin ningún resto ni suciedad para que nuestras mermeladas se conserven perfectamente.
En la preparación de la mermelada comenzaremos añadiendo la fruta en trozos pequeños a una olla de tamaño adecuado a la cantidad que queremos utilizar.
Si hacemos mermelada con frutos pequeños, como moras ó frambuesas, no es necesario cortarlas o desmenuzarlas. Si son de mayor tamaño, deberemos trocearlas, para conseguir que la cocción sea más rápida.
A esta fruta le incorporamos azúcar, en una proporción variable.
Nosotros preferimos no agregar demasiado, porque nos parece más sana la mermelada si no lleva tanto azúcar añadido. Pero, en todo caso, la cantidad dependerá del gusto de cada uno.
La proporción estándar es de entre 500 gramos y un kilo de azúcar por cada kilo de fruta. El azúcar actúa como espesante; si se quiere reducir la cantidad a emplear de esta sustancia, podréis hacerlo de la forma que os explicaremos más adelante.
Cuando tengamos en la olla toda la fruta con el azúcar, iniciaremos la cocción con el fuego al máximo, vigilando continuamente y dando vueltas con una cuchara de madera para evitar que se queme el contenido.
En cuanto rompa a hervir, bajamos el fuego y dejamos que cueza lentamente, pero debe continuar hirviendo.
Hay que impedir a toda costa que se pegue, seguiremos dando vueltas cada pocos minutos.
Opcionalmente, podemos ir aplastando la fruta contra el borde del recipiente con una cuchara , y que la mermelada vaya espesando.
Nuevamente, según preferencias, podemos optar por espachurrar toda la fruta ó bien sólo una parte y dejar otra, para encontrar trocitos en la mermelada.
A nosotros nos gusta esta segunda opción. La combinación de fruta triturada con algunos tropezones nos parece perfecta.
Normalmente con 30 minutos de cocción es suficiente para tener la mermelada lista, pero dependerá de qué tipo de fruta estemos usando.
La probaremos con mucho cuidado de no quemarnos, y según el grado de cocción y el sabor, en caso de necesitarlo, agregaremos más azúcar.
Si queremos que nuestro producto sea más espeso, dejaremos que cueza un poco más para que vaya consolidándose.
A menor cantidad de azúcar le costará más compactarse, pero disponemos de remedios naturales que podemos emplear, como el alga agar agar, que se añadirá casi al final del hervido y que actúa como espesante natural cuando la mermelada se enfría.
Con una pequeña porción de agar agar conseguiremos la densidad deseada, pudiendo incluso gelatinizar el producto… Es fundamental realizar la mezcla uniformemente.
Una gran ventaja del agar agar es que no modifica el sabor de nuestra mermelada, simplemente actúa como espesante.
Cuando nuestra mermelada esté lista, apagaremos el fuego y añadiremos zumo de limón, así nuestro manjar se mantendrá intacto durante mucho tiempo.
El limón actua como conservante natural, evitando la oxidación y putrefacción.
Dejaremos reposar un rato para que se enfríe un poco y, a continuación, iremos rellenando hasta el borde los botes con la mezcla resultante, para impedir que quede aire en el interior.
Seguidamente hay que cerrar los botes con fuerza y sellarlos al vacío al baño María. Para esta operación , los introduciremos en una olla con suficiente agua, de modo que permanezcan sumergidos. Evitaremos que se muevan o que choquen entre ellos, colocando un paño en el fondo de la olla. Ponemos el agua a cocer, y aproximadamente a los diez minutos de hervido oiremos unos pequeños “estallidos”, que se originan cuando el aire que hay en el interior sale de los botes. Este detalle nos indica que ya están “al vacío”.
En cuanto todos nuestros botes estén sellados, con mucho cuidado de no quemarnos, los sacaremos de la olla y los dejaremos enfriar.
De esta forma tan sencilla dispondremos de nuestras propias mermeladas y evitaremos que se estropee la fruta, pudiendo consumir durante meses e incluso años, un alimento exquisito elaborado con los maravillosos frutos que nos proporciona nuestro huerto ecológico ó bosque de alimentos.
Música:
«Bomber (Sting)» by Riot
«Hon Kyoku» by Doug Maxwell/ Zac Zinger
«Sparse Clouds» by Quincas Moreira
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